A partir de un concurso, se eligió un proyecto para realizar un paseo inspirado en el cultivo de la rosa en una de las barrancas de esta ciudad bonaerense.
Un paseo por colores, aromas, texturas, sonidos y sabores fue la propuesta que surgió del concurso de proyectos de diseño para la construcción de un rosedal en San Pedro (Pcia. de Buenos Aires). Una iniciativa que requiere ingenio, presupuesto y tiempo; y que encontró en la propuesta del equipo liderado por Ana Inés Bajcura un conjunto de ideas que responde a medida.
En medio de dos grandes ciudades como Buenos Aires (a 164 km) y Rosario (a 140 km), San Pedro es un destino atractivo para visitar en escapadas de pocos días. Sus virtudes son varias: las vistas al río Paraná desde sus barrancas, la vegetación extendida y diversa, y el casco histórico a escala de quienes prefieren caminar o circular en bicicleta. En cada uno de los puntos, el aroma de los tilos, los naranjos y otras especies aportan a la experiencia de la visita. Sobre estas cualidades se apoya el proyecto de Bajcura, que tiene una serie de objetivos: Conocer y difundir la producción local de rosas, las combinaciones paisajísticas, los secretos de su cuidado, revelar el “detrás de escena” de un ramo (desde el injerto hasta el packaging) y generar diferentes “hitos” para que sean visitados “charlando, mateando, en familia y con amigos”, sostiene la autora.
Sobre una barranca, el paseo se abre a la calle con una gran pérgola, y se anuncia con un sector de cartelería y novedades. Integrado a ellos se encuentra un muro calado que va modelando y conteniendo los diferentes lugares: en algunos tramos se transforma en asiento, pérgola, escalinata o escenario. Durante el trayecto los visitantes se toparán con una pérgola túnel, sectores de descanso y un centro de interpretación.
El acceso será reconocible por su forma de “pétalo de rosa”, realizada con caños y cubierta por cañas y coloridas bignonias venustas. El portal permite la evacuación ante una emergencia con aperturas de 180º y cuenta además con un portón peatonal y para vehículos. También se previeron sitios para estacionamiento de automóviles y un pequeño sector para bicicletas y motos.
Formaron parte de la organización del concurso la Cámara de Viveristas, Floricultores y Afines del Noreste de la provincia de Buenos Aires, la Sociedad Argentina de Paisajistas, la Asociación Argentina de Rosicultores, el INTA San Pedro y la Municipalidad de San Pedro. Todas estas entidades seleccionaron el proyecto porque es factible de replicar en otros espacios de la ciudad y puede concretarse en el corto plazo.
En este sentido, la propuesta de Bajcura se pensó en etapas. En un primer momento, por ejemplo, el Centro de Interpretación será descubierto y podrá contar con stands para venta de merchandising. En una segunda etapa, en tanto, podría incluirse una oficinas o sala de reuniones para charlas, “incrustada en la barranca y con cubierta verde”.
Los senderos acompañarán los desniveles. En el programa era explícita la búsqueda de una idea que incluyera a personas con discapacidad, por lo que el equipo de Bajcura estimó que quienes tengan una limitación motriz podrán acceder hasta el nivel +13 m. Desde allí hasta el nivel +17 m se utilizan escaleras.
Entre tramo y tramo se ubican los lugares de estar que, junto con las rampas y escaleras, servirán para dar charlas entre los árboles, como si fueran “canteros que bailan alrededor de ellos”, expresa la autora.
El escenario aporta otra novedad a la propuesta. Fue pensado en “un lugar en lo alto”, para interpretar música, como lugar para premiaciones, teatro de títeres y otros espectáculos. El área será muy sencilla, materializada con “tierra apisonada”.
Al comienzo o al final del recorrido se propone, además, una pérgola de rosales con asientos integrados al muro para descansar y disfrutar.
En cuanto al paisaje, Bajcura imaginó, en una primera etapa, armar el sitio con un mix de rosales; mientras que rodeando el centro de interpretación se propone una combinación de rosas en degradé del amarillo al naranja, y sectores de jardines perfumados con Olea fragans, Cestrum nocturnum, jazmines, etcétera.
En un principio, será necesario el cierre del predio y la utilización de la parte baja sin desniveles para comenzar con su plantación. Los caminos se proponen con base de suelocemento para estabilizarlos y para la segunda etapa se sugiere la terminación con asfalto en frío.
En tanto, para la parte superior de la barranca se pensó en promover una zona de selva en galería típica de las regiones ribereñas, como un aporte para la regeneración y estabilización de la vegetación original del borde del río.